¿Formación externa o interna?
Este es un debate constante para las grandes organizaciones. ¿Cómo elegir la mejor opción para formar a los equipos internos?
Por un lado, la formación externa. Siempre puedes encontrar un proveedor que trate la temática que necesitas desarrollar y además, con experiencia en la entrega de formaciones similares en otras organizaciones. Aunque siempre le va a faltar algo vital: el conocimiento específico de tu organización y su realidad.
Por otro lado, la formación interna. ¿Quién mejor que tus propios capacitadores para entender las singularidades de tu organización, para trasladar su conocimiento y experiencia a sus iguales? Su autoridad, su cercanía a la problemática, su empatía con sus iguales rompe barreras.
Mucha gente cree que a los segundos lo que les falta es experiencia formativa (miles de horas haciendo lo mismo para poder acercarse a los primeros). Gran error.
Ventajas de la formación interna vs la formación externa
La principal diferencia entre una buena y una mala experiencia de aprendizaje no son las horas de experiencia formativas. Estas ayudan sin duda, pero todos hemos visto, vivido y sufrido a formadores profesionales.
La principal diferencia entre una buena y una mala experiencia de aprendizaje es la metodología, la técnica. Un formador o experto interno ya tiene lo principal: conocimiento y experiencia específicos. Ya es un experto en su campo. Por eso, para poder transmitir ese conocimiento solo necesita 2 cosas: habilidades y herramientas. Y específicamente habilidades de comunicación y de gestión de grupos.
Y aquí entramos nosotros. Porque formar es fácil. Si sabes cómo, claro.
Un colectivo de formadores internos bien identificado, segmentado y formado es una poderosa herramienta organizativa y transversal que permitirá a tu organización, entre otras ventajas:
- Una mayor agilidad en la creación y entrega, para atender a situaciones inesperadas (necesidades organizativas, operativas, comerciales, sociales…)
- Una mayor transferencia de conocimientos y experiencias. Crearás un repositorio de talento organizativo
- Un significativo ahorro de costes, en muchos casos superior al 50% del presupuesto formativo
- Una oportunidad de desarrollo personal y colectivo única. Sólo quien ha sido un formador interno de una gran organización sabe del compromiso que este rol supone.
Nosotros, en Be-skiller, fuimos formadores internos en su día. Hemos hecho todo el trayecto y por eso podemos acompañarte en cualquier fase de este increíble reto.
Si quieres potenciar, desarrollar y disponer de un auténtico repositorio de talento interno, contacta con nosotros.